Hace algunos años me propuse ser
una persona serena prometiéndome a mi misma que el único drama que habría en mi vida sería
el de las películas de HBO los domingos por la tarde. Pero como siempre, hay
unas variables que todavía no he aprendido a controlar.
Así como algunos hombres sufren la metamorfosis de lobo en cada luna llena (O cuando salen en manada a buscar viejas en los bares) las mujeres también tenemos unos días del mes en que nos parecemos a Bruce Banner cuando se transforma en Hulk.
Así como algunos hombres sufren la metamorfosis de lobo en cada luna llena (O cuando salen en manada a buscar viejas en los bares) las mujeres también tenemos unos días del mes en que nos parecemos a Bruce Banner cuando se transforma en Hulk.
A esa fecha tan “especial”, se le ha denominado el Día 28, que para infortunio de algunas (Entre esas yo) es una visita no deseada, que anímicamente
puede llegar dos veces al mes y dura 15 días, como quien dice, las hormonas se
apoderan de mí: Antes, durante y después.
Con el tiempo se aprende a sobrellevar
este obsequio de la naturaleza, a
mirarse al espejo y ver el reflejo de carecólico,
con uno que otro detallito de segunda adolescencia que sale en la cara mientras dura el famoso periodo… El
problema es que así quisiera aislarme del mundo mientras toda la tormenta
de estrógeno pasa, no puedo salir corriendo a esconderme a una cueva (O en su defecto ir a casa de los amigos gay para acurrucarme
con sus dos gatos) Y muchas veces lastimo a personas que quiero o por el
contrario debido al exceso de sensibilidad todo me afecta y salgo aporreada.
Es entonces cuando sospecho que me empezó el
SPM, que no es precisamente el Síndrome Pre-Menstrual, sino más bien el Síndrome de Protagonista de Melodrama,
pues la vida se me convierte en una telenovela cuya música de fondo podría ser
“Pasa ligera la maldita primavera, pasa
ligera y me hace daño solo a mi !!”
En mi situación afortunadamente existen algunas personas que me
aguantan, que ya me conocen y que han aprendido que en esos días, deben hacerle
caso omiso a mis chiripiorcas, que a propósito no son para llamar la atención;
es simplemente la Drama Queen que sale de vez en cuando a jugar con mis
emociones desbordadas.
Como experta en la materia, pude descubrir
que existen las combinaciones milagrosas de Té, Analgésicos y Chocoramo, pero
sobre todo que no hay Día 28 que dure
100 años ni soltera que lo resista.
Imagen: Corbis, Robert Dale
@SolteraDeBotas
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Imagen: Corbis, Robert Dale
