Confieso que durante estos días, he tenido algo descuidado mi amado Blog al no escribir con la frecuencia que se merecen mis solterísimas experiencias. Pero así como soy debota de la libertad, también soy esclava del trabajo. Lo cual es un mal no solo mío sino de muchas mujeres de este siglo, pues las tareas del hogar han quedado en un segundo plano y cada vez más no enfocamos en nuestra vida profesional. En mi caso en particular, al no tener hijos o marido que me estén llamando para que regrese pronto a casa, me permite dedicarle de forma apasionada gran parte de mi tiempo y por qué no, de mis pensamientos al trabajo.
Algunos de mis amigos se quejan pues a veces sienten que no estoy hablando de mi vida sino de una estrategia de Mercadeo, en donde maquiavélicamente todo puede estar fríamente calculado y la realidad es que no me molesta trabajar tanto, pues me encanta demasiado lo que hago y pocas personas se dan el lujo de que hacer lo que les gusta y que tras de eso les paguen. Al igual que en un negocio en donde se le invierte el mayor tiempo y recursos a la línea que más rentabilidad deja, es decir al producto estrella. En el plan de negocios de mi vida, la protagonista es mi carrera.
Mientras algunas amigas hablan con amor en sus ojos, sobre el hijo que perdió su primer diente, o la niña que está en el grupo de Danza, para mí los retoños son mis proyectos los cuales me dan satisfacciones muy grandes, así estos no me digan mamá. (Y en la oficina me apoden www.intensa.com)
Aunque también creo que dedico tanto esfuerzo a la vida profesional, para ocultar esa vida sentimental que se encuentra bastante descuidada, como aquel cuarto de la casa que te da pereza limpiar y organizar, mientras te esmeras por mostrar el mueble nuevo de la sala. O colocando otro ejemplo para que mis lectores hombres entiendan, que mi vida podría ser un partido parecido al de Colombia vs Argentina (De hace muchooos años), en donde el cinco representa mi carrera y el cero mi vida social.
Pero estoy clara de que no se puede tener todo en la vida, siempre se tendrá un poco más de una cosa que de la otra, aunque mucha gente viva diciendo que tienen un maravilloso hogar y éxito profesional, esto nunca será 100% cierto, pues el tiempo no es benévolo y no nos alcanza para dar suficiente.
El hecho no es reñir en si tengo la razón o no, pues cada quien escoge el camino que quiere seguir así como sus prioridades; claro que aquí entre nos, prefiero ser como la serpiente que solo sabe reptar por la tierra pero es la mejor, a ser un pato que anda, nada y vuela pero es muy torpe haciendo las tres cosas. Para terminar de soltar mi venenito (Por aquello de la serpiente) debo concluir que algunas mujeres disfrutan de sus maridos y yo disfruto de mi carrera (Pero recuerden que los hombres te pueden dejar, pero lo que has estudiado y aprendido siempre te acompañará).
@SolteraDeBotas
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